Una joya : El tomate canario

Tomate canario en  El escaldón

Ensalada de guarnición ( Cuñadas y excuñadas )

Lo bueno de tener una legión de cuñadas y excuñadas es que en las reuniones familiares siempre aparece un plato nuevo  y te puedes llevar la receta.
Esta ensalada de pimientos asados en particular era una de las aportaciones que hacía una de mis excuñadas , de costumbres vegetarianas  en su casa siempre había ensaladas y revueltos, con buenas mezclas de vegetales.
Los pimientos rojos asados me gustan  mucho así que enseguida me apropié esta receta, pero como en casa somos carnivoros convencidos , además de como entrante servida sobre una rebanada de pan fresco o tostado, también la servimos  como guarnición de carnes asadas o a la plancha.
Y como con la carne a la plancha me gusta mucho la piña asada , pues les hice un maridaje y doble disfrute de sabor.

Ingredientes:
-  4 pimientos rojos asados.
- 1 huevo.
- 1 diente de ajo
- Unas ramas de perejil.
- Aceite y sal.

Modo de hacerlo.
Poner a pasar el huevo.
Asar los pimientos: Lavarlos  y colocar  en una bandeja para hornear, salar y rociar con un chorro de aceite, meter en el horno entre 20 y 30 minutos a 170º.
Cuando estén listos , dejar enfriar un momento y retirar la piel , semillas y los denominados nervios del pimiento. Cortar en tiras verticales y luego trasversales para hacer trozos pequeños. Añadir  el diente de ajo, el  huevo pasado y las ramas de perejil   todo picado muy menudo, aliñar con un poco del jugo de asar los pimientos y rectificar de sal.
Con la carne a la plancha me gusta asar un rodaja de piña y acompañarla de ensalada.
Servir fría.

¡Buen   provecho !

Nota: En Canarias a los huevos cocidos los denominamos pasados o duros.

Tarta de moka de mi infancia

Esta tarta es buena, pero buena buena.

Era la tarta reina de los cumpleaños de mis amigas, Geni, Conchy y Ani, hijas de la mejor amiga de juventud de mi madre, Chonchi.

Yo siempre me quedaba con ganas de más, es muy golosa.

Curiosamente en casa nunca la prepararon y cuando crecimos, al dejar de ir a los cumpleaños infantiles empecé a echarla de menos, rondaría yo los veinticinco años cuando le pedí  a Chonchi  la receta  y se convirtió en la preferida de todos, en casa la hago habitualmente y siempre la llevo a reuniones familiares y de amigos, me gusta oír  ¡ Umm tarta de moka !.

En mi dietario de cocina hace la número cinco, con mancha de yema incluida, fruto del uso de los primeros tiempos, cuando cualquier receta te parece dificil.

Su preparación es muy sencilla y lo único que requiere es tiempo para enfriarse, unas dos o tres horas.

Yo hice un pequeño cambio y fue añadir café soluble, en la crema  y para decorar.

 Ingredientes:

- 1 lata de leche condensada.

- 5 huevos.

- 2 latas de Nata Ermol , y aquí está el truco, tiene que ser esta nata, su textura y sabor son la base.

- 1 kilo de galletas ( esta la hice con un paquete de 800 gr)

- Café hecho.

- Café soluble.

Modo de hacerlo:

Preparar tres cafeteras y dejar enfriar el café, endulzar.

Separar las claras de las yemas y montar las primeras a punto de nieve, añadir las yemas batidas, la nata, la leche condensada y dos cucharitas de café soluble, mezclar bien hasta conseguir una crema.

En una fuente poner una primera capa de la crema y sobre esta otra de galletas ligeramente mojadas en café, y alternar así sucesivamente, para terminar con una de crema, espolvorear con café soluble o si se quiere con cacao en polvo. Meter en la nevera por unas tres horas.

Lo siguiente es relamerse.

¡Buen provecho!

Nota:  Olvidé sacar una foto de la nata Ermol, y buscando por la red encontré comentarios sobre que en  Península no se comercializaba en todos los lugares , así que valdrá cualquier nata.
La nata Ermol  tiene una textura y un sabor distintos, es como una pasta que hay que batir, y que da mucha cremosidad.
Hay que tener cuidado al empapar las galletas ya que absorben el café muy rápidamente.
Si gusta la almendra molida se le puede poner  espolvoreada por encima.